Por Agustin Papalini

Vivimos en una sociedad bastante exitista, debemos parar la pelota y reaplentarnos el concepto de competir, priorizando por sobre todas las cosas el proceso formativo.  Para saber y nutrirnos más sobre todo esto diálogamos con Pablo Secarrat, psciólogo deportivo

¿Cómo transmitirle el mensaje a un niño que está comenzando a jugar al fútbol desde el técnico, desde los padres y que ese mensaje no lleve una carga, presión, o ansiedad?

“En primer lugar,un niño cuando empieza un deporte lo hace porque le gusta, por la sencilla razón de su estado natural de jugar y divertirse. Entonces los papás deben acompañar al niño emocionalmente y no ponerse en el rol del entrenador de darle indicaciones tácticas o técnicas cuando el chico ya tiene a su propio entrenador.”

¿cómo se hace para que el papá no tome el rol del entrenador?

“Depende de la educación deportiva, los clubes deben tener reuniones con los papás y que los papás deban entender cuál es su rol dentro del deporte, porque el papá tiene un rol muy importante en el deporte de su hijo y ese rol es acompañar, estimular, abrazar, consolar y también alegrarse, pero no tiene que confundirse con las indicaciones tácticas o con cuestiones del resultado.”

Cuesta que cada uno se ponga los límites sobre el niño, ¿cuándo los papás le trasladan esa necesidad de ganar, triunfar, eso se transforma en frustración o en violencia si no consiguen lo que tanto anhelan?

“Claro, ahí hay un tema que es muy importante, si vos a un chico le decis te juego una carrerita hasta la esquina, primero que el chico te va a correr y después te va a querer ganar, es lo normal y natural, nuestra especie es así, no pasa nada con eso, eso que traemos inhato, ahora que competir signifique ganar a cualquier precio es ahí donde nosotros estamos equivocando el camino del aprendizaje de la competencia. Nosotros tenemos que reaprender el concepto de competir, que en el proceso de competir está el proceso de aprender y en el proceso de aprender está el proceso de que manera me adhiero a ese aprendizaje, a ese sistema de juego que el entrenador me pide que yo esté. Entonces la pregunta sería ¿Cuál es la forma de transmitir, que le estamos transmitiendo los adultos a los niños? Es ganar por ganar, o querer aprender del deporte?, lo que se debe hacer es aprender a respetar códigos y formas que la competencia me exige y no focalizarme únicamente en el resultado .”

Formativo vs resultados, hoy se habla mucho de esa confrontación…

“Hay mucho del doble discurso, uno debe respetar los procesos de formación, porque más allá de cualquier resultado, en los procesos formativos es importante que jueguen todos y que tengan todos ese momento de jugar, entonces hay que ser de alguna manera coherentes con los procesos de formación y no tanto apuntar al resultado.”

El reglamento de inferiores habla de que son ganadores aquellos que terminan primero en lo que es el torneo Apertura y Clausura y el campeón se lo determina a fin de año,  o salvo que gane los dos torneos, ¿baja la expectativa de que uno sea ganador o campeón, por el concepto?

“Hay que cambiar un poco el ideal y el concepto para poder no ser tan exitistas porque sino después no se valora todos los méritos que se lograron para llegar hasta las instancias finales en este caso creo que el concepto de ganar o ganador y el concepto de campeón está más vinculado al exitismo que vivimos acá en argentina y tenemos que reaprender en el deporte, tenemos que reeducarnos en el deporte porque sino esto trae aparejado una presión en los niños y en los adolescentes que después se transfiere a decepción deportiva , el chico no tiene ganas de seguir jugando, no valora su esfuerzo o no valora sus rendimientos porque perdió o simplemente no tuvo la palabra campeón”.

(*) Pablo Sucarrat, Licenciado en Psicologia

Psicologo Deportivo en Rosario

Técnico Nacional de Fútbol ATFA