Marcelo Miranda, presidente del club Calera Central, comentó sobre los protocolos que se utilizan en el club en la situación actual de la pandemia del coronavirus.
A continuación la entrevista
¿Cómo es el protocolo, que se le pide a los niños y a los padres?
Marcelo Miranda: “Nosotros al comienzo de la actividad hicimos un comunicado con esta nueva manera de entrenar y el protocolo bueno, es simple. Hemos dividido la cancha en sectores, cada jugador tiene su espacio. El cual tiene tres metros de ancho por casi veinte de largo donde ahí tienen que trabajar cada uno con la pelota, también lo estamos haciendo en otras disciplinas como por ejemplo el hockey que también ha vuelto de esa manera. El trabajo principal en protocolo nosotros al ingresar tenemos la nómina de jugadores inscriptos, cada papá ha rellenado los datos con una declaración jurada con todos los requisitos que nos estaba pidiendo el COE y la renovamos cada quince días. Además, tomamos la temperatura del jugador, también uso de alcohol al ingreso de la actividad en la cancha y luego se coloca en el lugar que le toca desarrollar la actividad y ahí se desarrolla la clase durante cuarenta y cinco minutos.”
¿Ya no hay contacto, vínculo en un lugar común cómo se hacía antes habitualmente en vestuario?
Marcelo Miranda: “Claro. Eso no está permitido. Cada jugador debe venir ya listo para la práctica. Y su agua para hidratarse no debe ser compartida. Los profes están bien al tanto de todos estos temas. De esa manera vamos cumpliendo los protocolos. La salida del campo de juego y del club debe ser rápida.”
¿Los padres no se quedan en los entrenamientos?
Marcelo Miranda: “Hay muy pocos padres que se quedan. Lo cual hacen un distanciamiento social bastante bien marcado pero son los menos. Nosotros le hacemos conocer a los padres cuales son las condiciones.”
¿Qué crees de toda esta situación de la pandemia, en que los ha perjudicado?
Marcelo Miranda: “Mirá nosotros veníamos apostando que este año 2020 era el año de nuestro club. Tanto en las divisiones inferiores como en la primera división. Veníamos trabajando con un gran proyecto de inferiores de Calera Central. Y sin dudas que esto de la pandemia nos tiró un año para atrás un año del cual nos habíamos preparado bien en todas las categorías tratar de hacer un buen papel dentro de los campeonatos de la Liga Cordobesa. Y sin dudas que la pandemia nos afectó. Comenzamos a trabajar en zoom donde los profes daban clase y tratábamos de mantener el vínculo, de ser un cable a tierra.”