Micaela Fernández Ibáñez juega en los Patos Futbol Club, que se desarrolla en la liga de Mar del Plata, pero debido a que no se permiten equipos mixtos no puede jugar con sus compañeros de manera oficial.
Micaela es la única nena del club y juega al fútbol desde los cinco años. Sus padres la acompañan a jugar todo tipo de torneos no oficiales, ya que ahí si es aceptada y puede divertirse con sus compañeros. Su problema es cuando su equipo, Patos Futbol club, juega por la liga local porque según el reglamento de AFA no se permiten equipos mixtos.
Según cuentan los padres de la niña, Micaela pateaba la pelota desde que tenía un año y que cuando se levanta, automáticamente enciende la televisión y busca algún partido de futbol sin importar quien esté jugando.
Micaela juega al futbol en la posición de 5 y actualmente está parada porque para poder entrar al futbol femenino tiene que tener 14 años. Sus compañeros la adoran y la quieren siempre para su equipo, tiene gol y buen manejo de pelota.
La madre de la jugadora está cansada de escuchar quejas de por que su hija no juega y ella le responde diciendo que si tuviese la posibilidad Micaela ya estuviera jugando. También se cansó de los actos machistas y en su cuenta de Facebook largo un descargo contra la liga marplatense.
Además, inicio una campaña con el hashtag #DejenJugarAMica para que su hija pueda ser aceptada y jugar al fútbol de forma oficial.
Por Nicolás Nardi